¿Cómo y para qué?
Nuevos tiempos
Como todos sabéis todo conflicto tiene su origen en las relaciones interpersonales. Relaciones con nuestra pareja, nuestros familiares, relaciones laborales, relaciones sociales, relaciones institucionales… ¿Qué ha ocurrido en esta última década? ¿Cómo se han visto afectadas nuestras relaciones últimamente? ¿Qué ha cambiado en nuestras relaciones? EL CANAL.
Las relaciones interpersonales siguen siendo las mismas: mi suegra es una arpía, mi madre es muy pesada, mi jefe es un ogro, mi compañía de teléfono son unos lladres… sin embargo el canal que usamos para comunicarnos es diferente: donde antes teníamos que ir a un archivador a buscar una escritura, hoy tenemos que acceder a un disco duro o a un cloud. Donde antes teníamos que remitir a una carta, hoy a un correo electrónico. Donde antes había que buscar testigos para corroborar unas manifestaciones, hoy acudimos a facebook, mensajes sms… Donde antes había que acudir un perito calígrafo, hoy tenemos que contar con un perito Informático.
La tecnología en cierta forma es como Dios: está en todas partes. Nos acompaña en todas y cada una de las facetas de nuestro día a día: las relaciones sociales, personales, la música que escuchamos, los juegos que nos descargamos, aplicaciones para el móvil, el ocio, la prensa, la compra del Mercadona, tiendas online, las recetas de cocina… TODO. Absolutamente toda la información viaja y se almacena a través de dispositivos digitales: móviles, discos duros, clouds, internet… hasta el punto que si te peleas con tu mujer, probablemente lo hagas a través de Whatsapp.
Como veis nuestras actividades cotidianas tienen lugar vía tecnológica. Estas actividades van dejando rastros o evidencias en los distintos dispositivos o plataformas que empleamos para relacionarnos. De manera que si tenemos algún percance sin duda es posible encontrar alguna evidencia electrónica que de alguna manera “cuente nuestra misma historia” es decir corrobore los hechos.
En un mundo perfecto, no existen conflictos, ni se cometen delitos y por tanto los abogados estarían todos en el paro. Desgraciadamente para algunos (y afortunadamente para otros) este mundo no es perfecto (prueba de ello es la liga que va a ganar el Madrid…) y en este mundo imperfecto, también tiene cabida el delito en el mundo tecnológico.
El anonimato que proporciona internet y la pantalla del ordenador, unido a la gran cantidad de información que circula libremente por la red, dan como resultado un marco tentador para cometer delitos y eludir a las autoridades. Por este motivo las TIC’s se han convertido en herramientas necesarias en auxilio de la justicia y la persecución del delito.